Es vital que debilitemos las cándidas antes de atacarlas con un antifúngico.
De lo contrario, si éstas están fuertes, podrán combatirlo y con el tiempo se harán resistentes.
La mejor forma de debilitarlas es haciéndolas “pasar hambre”. Es decir,
a través de la alimentación.
ALIMENTOS NO PERMITIDOS
– GLUTEN
– Productos y alimentos que contengan azúcares.
– Fruta.
– Productos lácteos, incluidos los yogures y quesos.
– Alcohol.
– Levaduras como el pan, pizzas, cubitos del caldo.
– Patatas, champiñones y setas, calabaza y boniatos.
– Cacahuetes y pistachos.
– Productos fermentados como el vinagre.
– Harinas refinadas (arroz blanco, pastas…)
COMPLEMENTOS RECOMENDADOS:
Para los primeros meses:
– Mycokil, aceite orégano o citrobiotic
(Ir intercalando cada mes un fungicida diferente)
– Depurador hepático Epa Bio Detox de Intersa
– Enzimas digestivas Suravitasan
– Vitaminas del Grupo B
Posteriormente:
– Acidophilus y Bifidobacterias
– Vitamina c
– Multinutriente
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